PREMONICIÓN II
Te irás y quedarán los poemas
como los últimos prisioneros
de un Vietnam equivocado.
Quedarán las letras flotando
en el Mar de los Sargazos,
un mar sin costa
que desconoce los gritos de
sus ahogados.
Quedarán las letras como muro
de carga
para sostener lo que una vez
creímos cierto.
Quedarán
las letras.
Y cuando mucho tiempo después
volvamos a ellas
no encontraremos sino el
rastro difuso
de aquella esperanza ingenua
que tuvimos:
ser dos rayos que se
entrecruzan
sin devastarlo todo.
KARIM CHERGUI
El libro de Karim se leía íntegro ayer, en uno de esos rincones de Malasaña —Aleatorio, en c/ de Ruiz, 7— que hacen de la noche y la tarde madrileñas algo digno de probar, un lugar en el que se mezclan música y poesía con el ambiente alborotado de un bar de copas, pero, eso sí, donde se guarda el oportuno silencio ante la voz rompedora del poeta.
Allí tuve la suerte de estar, invitado por su autor, escuchando a muchos y distintos poetas leer los versos de Jacques y el mar, y leyendo también, ante el micro de Aleatorio, uno de sus poemas.
Fantástico poemario.
ResponderEliminar